Los jóvenes, el alcohol y la responsabilidad

La Policía profundiza los controles y solicita colaboración a los propietarios de locales nocturnos y padres que se sumen al trabajo, con el objetivo de evitar un hecho grave que afecte la salud o vida de las personas.

En estos últimos tiempos el tema ha salido nuevamente a la luz a raíz de incidentes ocurrido en bares, teniendo como común denominador la ingesta de bebidas alcohólicas, y que rápidamente son viralizados a través de las redes sociales por los propios jóvenes; en ese sentido la Policía ha profundizado los controles en bares y boliches, solicitando la colaboración y responsabilidad a sus propietarios a fin de evitar que hechos de desórdenes ocurran en esos lugares.
En tal sentido, el jefe de la Unidad Regional Uno Comisario General Víctor Téllez detalló que en lo que va del mes de mayo del corriente año, la Policía intervino en más de 12 hechos de desórdenes ocurridos en inmediaciones a bares, siete de ellos en zona del micro centro, donde jóvenes son protagonistas de alteración del orden público teniendo como común denominador la ingesta de bebidas alcohólicas.
Este es un tema no menor y que suele tener distintas derivaciones, pero la realidad marca que hay una serie de responsabilidades que parten, esencialmente, del necesario control por parte de los progenitores y del que no están exentos, por supuesto, los dueños de los locales y las autoridades de contralor, motivando esto que se profundicen los controles en inmediaciones de esos locales como así de boliches bailables.
Tiempo atrás las estadísticas marcaban que, en los horarios de madrugada con la salida de los lugares de diversión nocturna, era cuando se producían accidentes de tránsito de mayor gravedad y en la que participaban jóvenes, tal es así que se trabajó fuertemente con diversos estamentos del gobierno provincial y municipal, aumentándose los controles en el ingreso a esos locales, en la salida, controles de alcoholemia en las inmediaciones, antes, durante y después de esos eventos, sumado a campañas de concientización para evitar que quien conduzca el vehículo no ingiera alcohol.
Esas medidas permitieron una disminución en los accidentes de tránsito, pero ahora se plantea un nuevo inconveniente en razón de que no se trata sólo de lo que los jóvenes consumen en el interior de los boliches, sino que se profundizan con las denominadas "previas", generando que los chicos lleguen a esos lugares habiendo bebido ya una importante cantidad de alcohol.
Las "previas" contienen aspectos que es necesario analizar. Porque hay lugares de expendio de bebidas alcohólicas donde se reúnen los chicos para ingerir alcohol antes del ingreso a los boliches, una situación incomprensible si nos atenemos al hecho de que existe una norma legal que prohíbe la venta de alcohol a menores y después de las 23 horas.
Pero mucho más preocupante es cuando se conoce que los jóvenes realizan esas previas en las casas de familia, por lo que la responsabilidad, en ese caso, es absoluta de los progenitores. No debe descartarse tampoco el papel que les cabe a los dueños de los locales nocturnos, como bares, boliches, kioscos, quienes muchas veces anteponen sus intereses económicos en desmedro de la seguridad de los chicos.
En tal sentido, la Policía seguirá profundizando esos controles, solicitándose la colaboración de los propietarios de locales nocturnos, y que se sumen a este trabajo desde el lugar que cada uno ocupa, con el objetivo de evitar un hecho grave que afecte la salud o vida de las personas.