Dos jóvenes mayores de edad y un menor que se apoderaron de teléfonos celulares bajo la modalidad conocida como arrebato, fueron aprehendidos por la Policía en distintos puntos de la ciudad, mediante la utilización de las cámaras de seguridad y con la tecnología de rastreo que tenía uno de los dispositivos.
El primer hecho ocurrió a las 13:30 horas del último lunes, en calle Córdoba casi Ayacucho de esta ciudad. En el sitio, una mujer que circulaba al mando de una bicicleta por calle Córdoba, unos metros antes de llegar a la intersección con calle Ayacucho, fue interceptada por un hombre al mando de una motocicleta.
Allí le arrebató un teléfono celular marca iPhone X, artefacto cuyo valor actualmente se encuentra en la suma superior a los 65 mil pesos, por lo que la joven de forma inmediata se apersonó en la Comisaría Seccional Segunda, donde una vez radicada la denuncia, se activaron las tareas investigativas.
Durante la investigación el personal policial contó con la tecnología de rastreo del aparato mediante la utilización del GPS, logrando interceptar al causante del hecho, por calle Freitas casi Napoleón Uriburu de esta ciudad, siendo aprehendido en la vía pública, hallándose en su poder el bien denunciando como sustraído.
Por otra parte efectivos de la sección motorizada Alacrán, en circunstancias de encontrarse realizando tareas investigativas por un hecho de similares características ocurrido el día sábado en horas de la tarde en calles internas del barrio Colluccio, mediante las captaciones fílmicas de las casas ubicadas en inmediaciones, lograron identificar a los sospechosos.
Tras una sigilosa tarea los efectivos, interceptaron a los sospechosos en inmediaciones de la manzana 7 del barrio Juan Domingo Perón, hallando entre sus prendas de vestir el teléfono celular marca Samsung, modelo J-5, de similares características al denunciado como sustraído.
En presencia de testigos se procedió al secuestro, el cual fue reconocido posteriormente por la damnificada.
Detenidos y secuestros fueron trasladados a la Comisaría jurisdiccional, donde se notificaron situación procesal, permaneciendo alojados a disposición de la justicia, mientras que el menor fue entregado a sus progenitores, bajo guarda tutelar.