Filosofía de la Seguridad

Principio Filosófico de la Seguridad

La Filosofía es la disciplina del conocimiento que estudia a las cosas desde sus orígenes, su justificación y sus fines, es decir la esencia de las cosas.

Partiendo de este punto, la seguridad, tiene un origen o motivo, una justificación que la hace necesaria y una finalidad a la que esta dedicada.

Toda actividad relacionada con la seguridad, tiene un común denominador que permite establecer si estamos o no actuando en nuestro campo de trabajo. Cuando al Trabajador de la Seguridad , ya sea desde un Conductor o un guardia de seguridad y protección se le pide una labor, primero debe preguntarse, si dicha labor se ajusta al principio Filosófico de la Seguridad , en caso contrario, lo que le están pidiendo, está fuera de su campo de acción.

La gran sofisticación y diversidad en la Seguridad , como la higiene y seguridad industrial, la protección ecológica, la protección ejecutiva, la seguridad en la informática, la protección a bienes, instalaciones y valores, los sistemas de alarma, c.c.t.v., redes de hidrantes, blindajes, pasivos infrarrojos, detectores de temperatura, etc., no persiguen otra finalidad que la Prevención de hechos.

Elementos y Etapas de la Seguridad

Para poder llegar a una definición técnica de lo que entenderemos por el término SEGURIDAD, partiremos del análisis de los elementos que la conforman.

Para poder dar seguridad, se requiere contar con los siguientes tipos de elementos, es decir:

Técnicos: como el armamento, los vehículos, sistemas informáticos, equipamiento específico para contrarrestar las distintas modalidades delictivas.

Administrativos: como las leyes y reglamentos adecuados que permitan saber como actuar y utilizar a los elementos técnicos de la mejor forma.

Humanos: personal policial capacitado y actualizado en las distintas ciencias y técnicas que requieren los hechos que promueven la acción policial.

ETAPAS DE LA SEGURIDAD

Prevención: son las acciones destinadas a detectar anticipada y oportunamente, cualquier acto que pueda generar un daño o pérdida, con la finalidad de controlar, reducir y de ser posible eliminar la condición de peligro.

Disuasión : son las medidas adoptadas para desanimar o alejar de la mente del potencial delincuente, la intención de delinquir.

Reacción : consiste en la actuación rápida y eficiente que debe realizarse cuando llega a materializarse una amenaza o peligro, minimizar, mitigar y de ser posible neutralizar los daños generados por la ruptura del equilibrio, para restaurarlo a la brevedad.

El Delito

Independientemente de los tipos de delincuentes que se presentan, cabe destacar, el hecho innegable, de que la experiencia ha demostrado que el DELITO, en sus distintas manifestaciones, tienen una serie de factores comunes, que permiten, establecer normas básicas de actuaciones para su detección y desvío oportuno.

En efecto, existen 4 factores o elementos que al conjugarse en la forma y circunstancias adecuadas, darán como resultado la comisión de un delito, sea o no violento, esto es a lo que se denomina el CUADRADO DEL DELITO y que a continuación se esquematiza:

  • Motivo o tentación
  • Ocupar el menor tiempo posible
  • Correr el menor riesgo
  • Oportunidad de sorprender

La seguridad tiene que adoptar una serie de medidas para evitar o desviar la atención del delincuente hacia otros objetivos.

En forma simple podemos decir, que la manera más fácil de evitar al delito es eliminando y reduciendo las TENTACIONES que comúnmente tenemos o presentamos con gran descuido ante los demás, ello se debe efectivizar ante una eficaz tarea preventiva.

Por otra parte, una actuación decidida de la seguridad a través, del personal uniformado, armado y entrenado, que presenta una imagen de respeto, servicio y firmeza, adicionado con armamento adecuado, harán saber al delincuente potencial, que el RIESGO que corre es tan alto, que no vale la pena por la tentación que se presenta, exponerse en un delito en donde corre un gran peligro.

Hoy en día, la Seguridad en sus diversas áreas de aplicación requiere de una mayor tecnificación para lograr conformar una actividad basada en conocimiento y métodos sistemáticamente ordenados y probados que le den una permanencia y unificación a los principios y bases de la seguridad.

La seguridad como politica pública

Entendemos a la seguridad ciudadana como la situación de protección que el Estado, a través de los organismos e instituciones de distintos nivel jurisdiccional, brinda a los ciudadanos amparo a sus vidas y bienes.

Esta perspectiva considera a la seguridad como un problema ante el cual el Estado tiene la responsabilidad indelegable e imprescriptible de dar una respuesta, y, si bien entendemos que puede haber servicios privados que puedan complementar la acción estatal, ésta nunca puede ni debe ser reemplazada.

Así, sin la pretensión de agotar el tema ni la perspectiva de análisis, este documento intenta constituir una aproximación al tema. A los efectos de poder brindar ejemplos concretos de Políticas de Seguridad pública, se ha focalizado el análisis en el servicio Policial, entendiendo que no constituye el único servicio destinado a garantizar seguridad a la población, aunque sí el principal.

Se entiende que una política pública es el resultado de la actividad de una autoridad investida de poder público y de legitimidad gubernamental, que se presenta bajo la forma de un conjunto de prácticas y normas que emanan de uno o varios actores públicos.

Una política pública, entonces, puede caracterizarse por presentar los siguientes componentes:

  • Un contenido, entendido este como los resultados o productos obtenidos a partir de la movilización de recursos.
  • Un desarrollo, expresado a partir de programas que comprenden un conjunto de acciones articuladas en función de ciertos objetivos o resultados esperados.
  • Una orientación normativa, por lo que se presenta objetivos claros que pretenden satisfacer los intereses de ciertos grupos, sectores o clases sociales.
  • Un factor de coerción, ya que su puesta en práctica está legitimada por una autoridad legal que impone su cumplimiento a todos los actores para los que está destinada.

Desde esta perspectiva, el estado es considerado un actor fundamental en el interjuego social. Pero un actor dotado de condiciones y características especiales, un actor complejo y contradictorio, capaz hasta de realizar, en forma simultánea, acciones orientadas en sentidos absolutamente, ya no tan sólo diferentes, sino también contrapuestos y hasta contradictorios.

Esta peculiar modalidad que asume el Estado como actor es debido a cada conjunto de organizaciones que lo conforman (de gobierno, de administración y de coerción), se constituyen en arenas de lucha y negociación de la disputa de poder entre las fuerzas sociales.

El Estado como ente responsable de la Seguridad Pública , a través de la institución encargada de velar por el orden y la paz social, realiza una penetración en las fuerzas sociales, es así que la sociedad se encuentra permeada por la ingerencia estatal.

Las políticas de Seguridad pública deben apuntar a garantizar el cumplimiento del marco normativo que permite la vida en sociedad, y, en ese sentido, debe constituir en garantes del orden y de la integración social sancionados en el marco institucional reconocido como legítimo por la sociedad. Y en este sentido son también garantes de dicha legitimidad.