Un
triste episodio: Juicio a La Misión
El
“Cuaderno La Misión”, de Miguel Lotto
nos habla de un serio conflicto para La Misión hacia el
año 1947 (pág. 36) “La Misión había
perdido el aislamiento de las primeras décadas del siglo,
seguía funcionando con el sistema económico tradicional,
(única compradora de la producción y única
proveedora que utilizaba vales como moneda).”
Los
bonos, la despensa y la administración de La Misión
fue injustamente considera como explotación del aborigen
al estilo de otros obrajes. Llegaron a detener a los misioneros
como delincuentes.
En
este juicio quedó comprobado que los beneficios
se invertían en La Misión con un régimen
de intereses totalmente diferentes a los obrajes. Los beneficiarios
eran participantes en La Misión y la comunidad aborigen.
Está
en la memoria de los pobladores la entrega generosa de
los misioneros trabajando y padeciendo junto al aborigen y al
blanco sin buscar intereses personales. Los misioneros “llegan
solamente con el hábito puesto y se van solo con el hábito,”
sin llevarse nada.
Hacia
el 12 de diciembre de 1958 el Gobierno Nacional, con
la Presidencia de Arturo Frondizi, por Decreto Nº 11364/58,
considera ya INEXISTENTES LAS MISIONES CON ABORIGENES, interrumpiendo
todo tipo de consideración y apoyo.
Es
así como los Misioneros Franciscanos, concientes
de nuestras limitaciones, y con mucho dolor, dimos por concluido
este Proyecto Misionero con los aborígenes.
Venta
del aserradero a una empresa:
Ante
la imposibilidad de conseguir recursos para la administración
y sostenimiento del aserradero que era la fuente de trabajo para
un buen número de aborígenes y blancos, se ve como
única salida, la venta de las instalaciones a una empresa.
Los
Misioneros Franciscanos con mucho disgusto y sin posibilidad
de solucionar la situación de otra manera mejor, venden
a una empresa que consideran idónea para que continué
la fuente de trabajo para los aborígenes y blancos. Los
resultados no fueron favorables porque la empresa nos defraudó.
El
valor de la venta fue utilizado en regularizar endeudamientos.
Declaración
de Monumento Histórico
Por
Decreto Nacional el 12 de septiembre de 1958, se valoriza
La Misión y se declara que los restos de las instalaciones
de la antigua Misión, son reconocidos como Monumento y
Patrimonio histórico de la Nación, y se pide a los
Misioneros Franciscanos, sean responsables de cuidar la conservación
del edificio y predio declarado como monumento histórico.
También el Gobierno Provincial hace lo mismo.
Establecimiento
San Miguel
El
Gobierno Nacional y Provincial, reconociendo los méritos
y servicios de los Franciscanos a la provincia, hacen posible
la compra de un predio fiscal como lo concedían a otros
colonos para la mejora y la producción.