Prof. Neri Luis Rumich
   
 

Corría el año 1960, una tarde cualquiera de Septiem bre, en el local ubicado en Rivadavia al 700, se realizaba una exposición de dibujo, pintura y escultura. En la entrada estaba un señor elegantemente vestido atendiendo a la gente. Le pregunté si podía pasar y cortésmente me invitó a hacerlo. Era la primera vez que me encontraba en una exposición y frente a la obra de plásticos locales.

Al terminar el recorrido me dirigí a mi anfitrión y audazmente le manifesté que yo también pintaba.
Después de una breve charla me dijo que quería ver mi obra. Corrí a mi casa y en un santiamén estuve de vuelta. Se lo mostré. Sin decir nada, en silencio buscó un martillo y un clavo. En un espacio libre colgó uno de mis primeros paisajes. Yo tenía dieciséis años y no salía de mi asombro y profunda emoción.

Este gesto tan generoso marcó mi vida y definió para siempre mi vocación. La persona a quién me refiero era don Roberto Ornar Piccone y la exposición de la Peña Horizontes. IV Muestra - Salón de Primavera. Si bien se tiene conocimiento de la existencia de pintores vocacionales que documentan importantes hechos históricos y costumbristas en los primeros momentos de la vida de Formosa, recién en la década del 50 surge un movimiento plástico organizado: un grupo de soñadores funda la Peña Horizontes.

En septiembre de 1957 se lleva a cavo la primera muestra de Dibujo y Pintura con la participación de diez plásticos locales y 56 obras. Este hecho constituye el basamento a partir del cual se generan diversas manifestaciones artísticas que sirven de inspiración a nuevas generaciones.

La Peña realizó ininterrumpidamente más de veinte exposiciones, en salones prestados ubicados en el radio céntrico de la ciudad, en la pérgola que se encontraba frente a la Casa de Gobernadores, en las escuelas y en cualquier lugar adecuado y de fácil acceso a todo público.

Agrupó por muchos años a la mayoría de los plásticos formoseños.


La Peña no poseía local social; eventualmente funcionaba como tal el domicilio del presidente de turno. Las reuniones se hacían en la casa de los miembros en forma rotativa y era la oportunidad de mostrar los trabajos que se estaban realizando.


 

 

Se efectuaban críticas a las obras a partir de las cuales surgían enriquecedores debates estéticos. Estos constituían un estímulo para seguir trabajando y fortalecía el compañerismo.

En el año 1967,
siendo Directora de Cultura Provincial la Srta. Margarita Diez y sabiendo que la Peña deseaba brindar enseñanza artística, a los niños, jóvenes y adultos, propone la creación de un taller. Así nace el Taller Libre de Artes Plásticas, con aporte oficial en cuanto a infraestructura, personal de maestranza, muebles, elementos y materiales y es atendido gratuitamente por Roberto Piccone y Neri L. Rumich con la colaboración de Carlos Cerqueiras, Aníbal Bibolini y Héctor M. Noriega y en el Taller Infantil, Elizabeth Aldave de Navarro.

El Taller funcionó en el local ubicado en Saavedra al 300 casi Rivadavia. Las clases se dictaban en dos tumos, uno a la tarde dedicado a los niños y por la noche a jóvenes y adultos. Asi se concretaba un sueño largamente anhelado y se daba el primer paso para la creación de la Escuela de Bellas Artes.

La Peña
Horizontes organizó además concursos estudiantiles de manchas y pintura pavimental, los que constituían verdaderas fiestas estudiantiles con la participación de vecinos y público en general que alentaban la tarea de los noveles pintores.


Como grupo
han expuesto en salas de Buenos Aires, Mar del Plata, Rosario, Posadas y Resistencia. Se encargó de recibir y atender artistas que visitaban nuestra ciudad, así contó con la presencia de dos importantes figuras de la plástica nacional: Raúl Soldi en 1958 y Carlos Castañito en 1960.

Hoy a la distancia aquilato el tiempo transcurrido y valoro la conducta, la amistad y las convicciones que nos supieron trasmitir este grupo de soñadores.
Piccone, Bibolini, Cerqueiras y Noriega despertaron vocaciones, estimularon al público a disfrutar del arte y creer profundamente que la vida es más hermosa cuando se la mira a través de los ojos de un artista, ese hombre sensible que todos tenemos adentro y que no nos animamos a mostrarlo.

Cada vez que se inaugura una exposición y entramos a disfrutar del mágico mundo del arte, la Peña Horizontes sigue vigente cumpliéndose la consigna que alguna vez propusieron sus fundadores.


 
     
 
   
     
 
 
18 -Noviembre-Diciembre de 2005
 
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