Como se había previsto, a las 9 hs., las escuelas abrieron sus puertas y comenzaron a recibir a los niños que volvieron a llenar de algarabía los pasillos y salones donde los docentes organizaron la entrega.
"La consigna de que cada niño formoseño tenga la jornada más feliz posible con un regalo por el día de Reyes Magos, entiendo se ha cumplido con creces, ya que a cada rincón del territorio el gobierno llegó con un presente para todo el mundo infantil", coincidieron en señalar desde el equipo de gobierno encargado de todo el esquema de distribución de los juguetes en un número de doscientos mil.
En las escuelas donde se recibieron a los niños, los docentes encargados de la entrega de los presentes, expusieron su satisfacción por ser parte "de este gesto que demuestra que los pequeños deben ser el centro de todos nuestros esfuerzos, que es una de las recurrentes prédicas del gobernador Gildo Insfrán".
Es que aun antes y por supuesto durante gran parte de la mañana de la víspera, en los grupos de voluntarios que participaron del operativo de la distribución y entrega de juguetes destinados a todos los niños formoseños, tanto en la ciudad capital como en todo el interior, y en la sonrisa de los pequeños, se advirtió que se logró la meta de "nada se compara a la felicidad de un niño".
Ello fue así no solo porque resultó hasta emocionante el esfuerzo de todos, que, siguiendo las indicaciones dejadas por el primer mandatario provincial, recorrían y controlaban que los destinatarios del emprendimiento de la llegada de los Reyes Magos en toda la provincia, tuvieran la seguridad de un regalo que materialmente tiene un significado que podría ser medido específicamente, pero que en lo que concierne a su valor simbólico, representaba la fuerza de una energía que pone al Estado para llegar al corazón de cada hogar formoseño".
Lo positivo del esfuerzo realizado fue, una vez más, reafirmar el indefectible y permanente compromiso del gobernador Insfrán con la niñez formoseña, su atención afectiva, cálida, activa, amorosa y de una calidad que el tiempo enaltece en lugar de agotar.
"Esta disposición permanente del primer mandatario provincial para con los niños formoseños es una prueba más, de que la inclusión social no es un adjetivo teórico, sino una realidad integrada e integradora, articulada, sistémica y total, destinada a continuar el proceso de elevación de la calidad de vida del pueblo, en cada niño, en cada niña, en cada lugar, en cada escuela, en cada casa", se reflexionó en varias escuelas a través de autoridades provinciales que estuvieron verificando la entrega de los presentes en las escuelas.
La integración que esta actitud de entrega total pone en acto en los juguetes regalados, algo que constituye el resultado de un "magnífico gesto, de un profundo amor a la gente que destaca por sobre todo esa impronta tan especial de estar siempre presente, con la razón y el corazón, como siempre, penando en el destinatario de todas las acciones de gobierno, en sus personas y en sus valores personales y permanentes".
En el operativo desarrollado se comentaban sobre estos "valiosos resultados" que, una vez más, se cumplieron como habían sido planificados, dando cuenta de una realidad que "en el modelo formoseño es indestructible: si bien no es posible planificar el amor al prójimo, sí es posible comprender -como quedó demostrado- que la planificación, como metodología, como estrategia y como herramienta social, es esencial también cuando se trata del amor a la gente".
"El resultado exitoso de este gesto de amor se mide con las sonrisas de nuestros niños, que han sido permanente durante esta mañana cuando recibían sus juguetes", fue subrayado en la Escuela 335 del barrio aborigen Namqom, donde se expuso justamente que "nosotras nuevamente nos sentimos muy felices por ser parte de este gesto, que en esta comunidad en particular demuestra que se halla totalmente integrada y protagonista de este modelo".
La directora de la Escuela N°1, Delia Sosa expuso justamente que "es algo fantástico porque los chicos esperan, es una satisfacción que el gobierno de la provincia de Formosa haga con los chicos de todos los lugares, de manera que todos, hasta los más humildes, tengan sus obsequios" precisó.
En las escuelas donde se recibieron a los niños, los docentes encargados de la entrega de los presentes, expusieron su satisfacción por ser parte "de este gesto que demuestra que los pequeños deben ser el centro de todos nuestros esfuerzos, que es una de las recurrentes prédicas del gobernador Gildo Insfrán".
Es que aun antes y por supuesto durante gran parte de la mañana de la víspera, en los grupos de voluntarios que participaron del operativo de la distribución y entrega de juguetes destinados a todos los niños formoseños, tanto en la ciudad capital como en todo el interior, y en la sonrisa de los pequeños, se advirtió que se logró la meta de "nada se compara a la felicidad de un niño".
Ello fue así no solo porque resultó hasta emocionante el esfuerzo de todos, que, siguiendo las indicaciones dejadas por el primer mandatario provincial, recorrían y controlaban que los destinatarios del emprendimiento de la llegada de los Reyes Magos en toda la provincia, tuvieran la seguridad de un regalo que materialmente tiene un significado que podría ser medido específicamente, pero que en lo que concierne a su valor simbólico, representaba la fuerza de una energía que pone al Estado para llegar al corazón de cada hogar formoseño".
Lo positivo del esfuerzo realizado fue, una vez más, reafirmar el indefectible y permanente compromiso del gobernador Insfrán con la niñez formoseña, su atención afectiva, cálida, activa, amorosa y de una calidad que el tiempo enaltece en lugar de agotar.
"Esta disposición permanente del primer mandatario provincial para con los niños formoseños es una prueba más, de que la inclusión social no es un adjetivo teórico, sino una realidad integrada e integradora, articulada, sistémica y total, destinada a continuar el proceso de elevación de la calidad de vida del pueblo, en cada niño, en cada niña, en cada lugar, en cada escuela, en cada casa", se reflexionó en varias escuelas a través de autoridades provinciales que estuvieron verificando la entrega de los presentes en las escuelas.
La integración que esta actitud de entrega total pone en acto en los juguetes regalados, algo que constituye el resultado de un "magnífico gesto, de un profundo amor a la gente que destaca por sobre todo esa impronta tan especial de estar siempre presente, con la razón y el corazón, como siempre, penando en el destinatario de todas las acciones de gobierno, en sus personas y en sus valores personales y permanentes".
En el operativo desarrollado se comentaban sobre estos "valiosos resultados" que, una vez más, se cumplieron como habían sido planificados, dando cuenta de una realidad que "en el modelo formoseño es indestructible: si bien no es posible planificar el amor al prójimo, sí es posible comprender -como quedó demostrado- que la planificación, como metodología, como estrategia y como herramienta social, es esencial también cuando se trata del amor a la gente".
"El resultado exitoso de este gesto de amor se mide con las sonrisas de nuestros niños, que han sido permanente durante esta mañana cuando recibían sus juguetes", fue subrayado en la Escuela 335 del barrio aborigen Namqom, donde se expuso justamente que "nosotras nuevamente nos sentimos muy felices por ser parte de este gesto, que en esta comunidad en particular demuestra que se halla totalmente integrada y protagonista de este modelo".
La directora de la Escuela N°1, Delia Sosa expuso justamente que "es algo fantástico porque los chicos esperan, es una satisfacción que el gobierno de la provincia de Formosa haga con los chicos de todos los lugares, de manera que todos, hasta los más humildes, tengan sus obsequios" precisó.